Domótica, la tecnología que invade el hogar
La Dómótica es la especialización tecnológica que más se ha desarrollado en las últimas décadas, aunque lo ha hecho a la chita callando, sin grandes estridencias y colándose por la puerta de atrás. Para muchos de nosotros, incluso para aquellos que hacemos uso de estas tecnologías avanzadas, el alcance y el impacto que la domótica puede llegar a tener en nuestras vidas y costumbres, es todavía un misterio.
Por definición, la domótica consiste en la implementación de una serie de sistemas tecnológicos en diversos dispositivos, que nos permiten manejar, controlar y programar muchos de estos dispositivos a nuestra conveniencia y además hacerlo de forma automatizada o remota. Es decir, podemos controlar o programar los aparatos de casa para que realicen sus tareas de una forma automática., lo cual facilita mucho la vida y resulta muy cómodo.
Electrodomésticos del futuro
Este año, las ediciones de ferias tecnológias se han visto asaltadas por los electrodomésticos, si seguimos con esta progresión cada vez se parecerán más los frilis y l@s am@s de casa. Por supuesto, todos los presentados son electrodomésticos inteligentes, diseñados para facilitarnos la vida. Las estrellas protagonistas fueron los frigoríficos, cada vez más adelantados, capaces dentro de nada de hacer la compra por nosotros.
La figura del robot doméstico ya existe, solo que no siempre tiene figura humanoide y ya es tan habitual que no lo consideramos un robot ¿qué, si no? son los aparatos de limpieza programables, que trabajan solos independientemente de que nosotros estemos o no en casa?
La novedad, en cuanto a tecnología domótica ya ha superado la capacidad de hacer o de programar y ahora se mueve en otra dirección, la de comercializar un cerebro capaz de impartir órdenes a nuestros aparatos domésticos, órdenes que podemos darle nosotros mismos a través de nuestros teléfonos móviles, porque cuentan con avanzados sistemas de reconocimiento de voz. Es decir: ya no tenemos ni que molestarnos en entrar dentro del sistema de cada aparato, solo contactar con el cerebro y espeificar las ódenes: quiero que el horno se encienda a las xx, que la temperatura de casa esté a xx grados, que la tele me grabe tal programa y que todo esté listo para la hora xx que llego a casa.
Tecnología enfocada a la seguridad
Toda esta tecnología ha encontrado un campo recién cultivado en el mundo de la seguridad. Las antiguas cámaras de vigilancia dejan paso a modernos pequeños drones capaces de moverse por nuestra casa (tanto por el interior como por el exterior) y transmitirnos imágenes a tiempo real si queremos hacer comprobaciones. Podemos conectar con nuestra casa en cualquier momento, si creemos que nos hemos dejado algo encendido, por ejemplo, o recibir información directa de forma automática en caso de alguna situación de peligro, como un incendio o inundación.
Los sistemas de seguridad y vigilancia son cada vez más complejos en cuanto a su tecnología y capacidades, pero a la vez más sencillos e intuitivos en cuanto a su manejo. Ya no necesitamos largas claves y contraseñas olvidadizas para activarlo o desactivarlo, tan solo nuestra huella o algún otro sistema biométrico y tampoco necesitamos ya estár en casa para hacerlo, ya que podemos realizar cualquier acción o comprobación desde nuestro dispositivo móvil.
La verdad es que tenemos a nuestro alcance medidas de seguridad para nuestra casa que, hasta hace solo unos años, veiamos en edificios como museos o bancos.
Domótica aplicada a la arquitectura
La tecnología inteligente de la domótica ha traspasado las barreras del interior de nuestras casa y se extiende a todo el edificio y más allá, a sistemas que se incluyen en la construcción y que permiten mejoras de eficiencia en aspectos que hasta hace muy poco solo podíamos imaginar.
Conceptos como bioclímática, ecoarquitectura están a la orden del día y tanto los materiales como los sistemas energéticos cambian constantemente en pro de un menos consumo, contaminación y una máxima eficiencia. En este blog hemos publicado numerosos artículos sobre este tipo de temas, desde centros comerciales, rascacielos u hoteles, hasta islas flotantes o residencias privadas que destacaban por contar con este tipo de infraestructuras.
También es cada vez más habitual ver proyectos tecnológicamente eficientes desde sus comienzos y aunque en España aún andamos algo atrasados con respecto a centro y norte Europa, también podemos encontrar proyectos muy interesantes en esta dirección, como por ejemplo las «Barracas Bioclimáticas» proyectadas por Luis de Garrido en Valencia; un proyecto que contó con el impulso y el apoyo de Biosfera XXI.