Los puros habanos están muy unidos al estilo de vida

En mi ciudad natal, el estilo de vida de los industriales, hombres de negocios y las grandes fortunas en general, está definido por unas costumbres heredadas de los tiempos de las Colonias, pequeños “detalles protocolarios” que producen un lapso temporal de sumo placer, como si del “descanso del guerrero” se tratase. Así, dichos detalles comunes, nos acompañan al Casino, al Club, en las Fiestas Patronales, al palco del Estadio, etc., donde, investidos de un traje elegante, solemos deleitarnos con una buena taza de café de Colombia y un magnífico puro habano, objeto muy unido al estilo de vida.

En los últimos años el fumar se ha convertido en algo así como un peligro nacional, por eso he de matizar que fumar un habano es como jugar en otra liga y os recuerdo que ni se debe tragar el humo, ni las partículas son tan perjudiciales para los fumadores pasivos como puede serlo el típico cigarrillo de papel liado. Sólo el aroma, unos más fuertes que otros, puede resultar una molestia, por eso se suele disponer de una sala específica para saborear estas joyas del tabaco: las cavas de puros, que suelen instalarse en lugares bien ventilados, que suelen coincidir con la estancia favorita del anfitrión.

Los puros habanos son los más apreciados del mundo desde hace siglos. Siempre fabricados a mano, su elaboración precisa y el tabaco selecto, ha ido produciendo tres tipos de Fortaleza: alta, media y baja, dependiendo de su potencia y varios calibres o cepo, para distinguir sus tamaños en longitud y grosor. Al margen de esta clasificación general, los matices de sabores convierten unos puros de buenos en excelentes, siendo una cuestión de paladar, como en los vinos, del sabor que queda en los labios y en la boca, así que puedo atreverme a daros una lista de los que considero mejores puros habanos del mundo, tanto por experiencia propia, como por la opinión más generalizada de los fumadores que he conocido en estos últimos 40 años.

Si hablamos del puro habano más caro del mundo, Cohiba lanzó su serie Behike especial para conmemorar su 40º Aniversario en el año 2006. La Corporación de Habanos de Cuba elaboró una magnífica producción de 4000 unidades presentadas en lujosas cajas de a 20. Cada caja vale 15.000 €, lo que supone un precio de 375 € cada puro. Pero esto fue una serie limitada.

El mejor cigarro puro de La Habana y también el más caro del mundo, es el Cohiba Behike 54. Cada unidad cuesta sobre los 30 €. Está elaborado a mano (no puede ser de otra manera) con las mejores hojas de medio tiempo de Vuelta Abajo (Cuba), mide 144 X 21.43 mm., es decir, cepo 54, su nombre de Galera es Larguito Nº 5 y tiene una media/alta Fortaleza. Otro gran cigarro de la marca es el Cohiba Maduro Genios, con un cepo de 52, caracterizado por sus 5 años de envejecimiento, que le da unos sabores muy particulares. Al igual que su tamaño, el precio resulta algo inferior a su hermano mayor, pues ronda los 21 € la unidad.

He tenido el privilegio de probar algunos habanos de la marca H. Upman y siempre me han parecido muy buenos, con un aroma a maderas nobles y de sabor (Fortaleza) medio, de paladar agradable, pero es en el año 2005, con el Mágnum 50, cuando alcanza un grado sobresaliente de calidad. El cigarro mide 160 X 19.84 mm. (cepo 50) y muchísimos fumadores lo consideran uno de los mejores cigarros modernos. Su precio ronda los 11 €.

Toni Ferrando.