Viajar degustar y cocinar con Antonio Amenedo

admin 18 mayo, 2014

Antonio Amenedo es chef y socio de uno de los proyectos gastronómicos más vanguardistas (en el momento de su creación, hoy en día totalmente consolidado) y exitosos del noroeste español. Reparte su corazón entre su familia, los fogones y su pasión por los viajes; pasión que le ha llevado a recorrer el mundo, a ser conocido como el Phileas Fogg coruñés y convertirse en un auténtico alquimista en la cocina. Todo su tiempo libre, Amenedo lo dedica a viajar, de cocina en cocina, recopilando las técnicas y los secretos de algunos de los mejores cocineros del mundo y sus apasionados viajes iniciáticos gastronómicos han florecido en una cocina muy personal e innovadora que comparte habitualmente con sus amigos entre los muros centenarios del Pazo de Santa Cruz de Mondoy, muy cerquita de Betanzos, en La Coruña.

En 2011, Antonio Amenedo se planteó un reto, dar la vuelta al mundo catando lo mejor de la gastronomía internacional y aprendiendo técnicas para incorporarlas a su cocina. Cumplió su sueño: viajo durante un mes por los mejores restaurantes de Europa, Oriente medio, Asia y Estados Unidos (sus escalas más destacables fueron Copenhague – donde visitó el más veces nominado como mejor restaurante del mundo, el Noma-, Dubai –se metió en la cocina del restaurante del Burj Al Arab, Al Mahara– , Singapur –se hizo amigo del gurú Ignatius Chan, el chef del Iggy’s-, Sydney –degustó el sushi del Tetsuya’s preparado personalmente por Tetsuya Wakuda, Nueva Zelanda –estudió las técnicas y la gastronomía ancestral de los mahoríes-, Chicago –comió en el Alinea de Grant Achatz- y Nueva York –disfrutó de las exquisiteces del Wd-50 de Wylie Dufresne-entre otras), una experiencia única que le permitió conocer nuevos productos, nuevas técnicas culinarias, nuevos empleos de las especias y le abrió un nuevo horizonte para sus propias creaciones gastronómicas.

Una vez el bolsillo se hubo recuperado de este suculento viaje, Antonio Amenedo se planteó el siguiente reto: Sudamérica. También lo ha hecho. Ha viajado por casi todo Perú: Cuzco, Lima, Macchu Picchu, y por Brasil, desde la selva amazónica hasta Río de Janeiro. Por el camino ha conocido y probado los platos de chefs como Pedro Schiaffino, del restaurante Malabar de Cuzco, del afamado Astrid &Gastón de Lima hasta la más genuina gastronomía inca en Macchu Picchu. Aventura aparte fue Brasil con incursiones en la selva amazónica y el disfrute de los carnavales de Ríode Janeiro. Y es que Antonio Amenedo –Pepiño para los amigos- es un tío simpático y no es de extrañar que allí a donde vaya, consiga meterse hasta el fondo en las cocinas, crear relaciones de camaradería y disfrutar al máximo de las posibilidades y experiencias que cada cultura le brinda. El viajar es una parte importantísima de su vida, procura hacerlo acompañado por su familia, su mujer Pilar y su hija Carmen y todo los que absorbe queda registrado en su cabeza –su disco duro, como él lo llama- para luego ser aplicado a su día a día en la cocina del pazo.

Cuando hablamos del pazo nos referimos al Pazo de Santa Cruz de Mondoy, un espacio histórico destinado a la calebración de eventos que fue un proyecto pionero en España, un sueño vivido por un grupo de amigos de la infancia que consiguieron rehabilitar 1,500 metros cuadrados de un palacio del siglo XVI y acondicionarlo con respeto y contemporaneidad a las necesidades de un gran restaurante y varios espacios y salones para la celebración de eventos de hasta 2.000 asistentes, principalmente bodas, aunque también suelen celebrar eventos deportivos, reuniones de empresa y una –ya habitual- cena de Navidad. Además se los salones especialmente diseñados, han aprovechado espacios muy interesantes, como la entrada y el alpendre para adaptarlos a los cócteles de bienvenida, conciertos, etc… o los jardines, donde incorporan carpas para eventos en el exterior.

Es evidente que el trabajo de Antonio Amenedo ha tenido una gran importancia en el éxito de la empresa. Su preocupación por la innovación gastronómica, el cuidado diseño de los menús acordes para cada ocasión unido a la utilización de las mejores materias primas y al mimo prestado a la presentación han convertido al pazo en un referente para las celebraciones en Galicia y a su cocinero, en una pieza clave para la evolución de la gastronomía contemporánea en Galicia. Sus experiencias y reflexiones nos las cuenta desde su blog «El cocinero del pazo», lleno de color y sabor.