Un collar de Guiness, L´Incomparable

Hace unos meses, en octubre del 2013, se puso a la venta en una conocida joyería de Singapur, un collar de Guiness, L´Incomparable, una pieza impresionante hasta para las mayores colecciones de joyas del mundo. Se trata de un diamante amarillo tallado de 407 quilates, que destaca junto a otros 90 blancos de menor tamaño, que sumados nos da otros 229 quilates. Un collar de 636 quilates llamado L´Incomparable que salió a la venta por 55 millones de dólares, es actualmente la joya más cara del mundo y está catalogada en el Libro Guiness de los Records desde el año 2012.

El diamante amarillo tiene suficiente calibre como para considerarse único en el mundo y su valor bien podría aproximarse a su precio de partida, pero la joyería Mouawad decidió elaborar este magnífico collar que nos recuerda a los legendarios relatos de aventuras o las películas a lo Indiana Jones o las míticas Minas del Rey Salomón. Este diamante amarillo fue encontrado sorprendentemente por una niña en un vertedero de basuras en la República Democrática del Congo, entonces llamado Zaire, a principios de los años 80.

El Incomparable es un diamante amarillo/marrón natural y se calificó en 1984 como perfecto. Se desechó junto a un montón de escombros procedentes de las minas considerando improbable que contuvieran diamantes, pero se equivocaron. Entre toda la escoria, se encontraba un diamante de 180 g (890 quilates), que al tallarlo se convirtió en la joya más grande del mundo. Finalmente se redujo a sus actuales 407,48 quilates. Si contamos todos los diamantes hallados y registrados en el mundo, de todos los tipos y colores, L´incomparable sería el cuarto de mayor tamaño (después de ser tallado) de todos los tiempos. Sólo el Cullinan, el Excelsior Diamond y el Estrella de Sierra Leona se aproximan al tamaño de esta fantástica reacción del carbono puro natural.

Los joyeros Marvin Samuels, Zales y Louis Glick (propietario actual) fueron sus primeros propietarios y encargados de las sucesivas transformaciones, cortando la increíble piedra en 14 fragmentos, con la pieza mayor reconocida por el nombre sabido del diamante. Desde entonces, esta piedra preciosa ha pasado por museos y por diversos pretendientes, además de recorrer centenares de exposiciones. Se ha intentado subastar en diversas ocasiones, pero a pesar de alcanzar las pujas más altas hechas jamás por una piedra preciosa (12 millones de dólares en 1988), el vendedor siempre las ha retirado de la venta por considerar baja la puja. En el 2002 salió sorpresivamente en ebay por 15 millones de libras esterlinas, pero nadie pujó en el tiempo de duración de la subasta.

En Asia la venta de piedras preciosas resulta más productiva que en Occidente. Es un hecho probado que los europeos siempre han colocado sus mejores artesanías en dicho mercado, sobre todo en la India, verdaderos fanáticos de los brillantes, esmeraldas, rubíes y zafiros de grandes dimensiones. Nada más saberse de la venta en Singapur, se conocía ya a una pareja interesada en la adquisición de L´Incomparable. Los organizadores de la venta no han querido revelar el nombre de estos posibles compradores asiáticos, pero de no haberse efectuado la venta, sólo unos días más tarde, en Ginebra, se subastó otro diamante tallado, esta vez rosado, por una cantidad nada despreciable de 52 millones de euros, sin duda, el record actual si nadie certifica el precio final pagado por L´Incomparable.

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Toni Ferrando.