El desenlace de SuiteBlanco y el aterrizaje en España de Al Hokair

En julio de 2012 fallece Bernardo Blanco Solana, fundador de SuiteBlanco, en un momento muy delicado financieramente para la empresa. La necesidad de financiación se convierte en acuciante para SuiteBlanco que continúa buscando modos de reflotar su liquidez. Al no conseguir un socio inversor es imposible mantener el aumento de producción para abastecer a las franquicias, por lo que Gordon Brothers Europe propone un programa inmediato de cierre de 43 tiendas en distintos puntos de España, dos en Portugal y la liquidación de existencias de las mismas para proporcionar liquidez a la firma, lo que conlleva anuncios de despidos para unos trabajadores ya descontentos por retrasos y recortes de salario, los rumores de impago a proveedores y demás.

SuiteBlanco cierra el ejercicio 2012 dando pérdidas por segundo año consecutivo; el grupo textil, integrado por siete sociedades arroja una pérdida total de 33,51 millones de euros. Según información de Europa Press, facilitada por fuentes judiciales, TMV registró unas pérdidas de 10,27 millones de euros, seguido de Blanco Fashion, con un resultado negativo de 8,3 millones de euros, Tesbi (-5,67 millones), Vagtex (-4,49 millones), Summer Gestión (-2,44 millones), Yosi (-1,56 millones) y Mallorca Textil (-761.000 euros). La verdad, me parecen unas cifras irrisorias si las comparamos con el volumen de negocio conseguido por la firma y ya, si lo comparamos con las pérdidas de otras empresas ese mismo año, como los 19.193 millones de Bankia, son, lo que se suele llamar “el chocolate del loro”. Me parece increíble que Bankia limpie su balance con dinero procedente del rescate solicitado por el gobierno, que pagaremos entre todos, indemnice millonariamente a algunos de sus ex dirigentes y sin embargo, nadie mueva un dedo para ayudar a una empresa con más de cincuenta años de antigüedad que ha funcionado correctamente durante prácticamente toda su trayectoria.

En un contexto sociopolítoeconómico en el que la Comunidad de Madrid crea una isla legal de protección al proyecto Eurovegas con la disculpa de que se traducirá en creación de empleo, como si el fin futurible justificara cualquier medio a día de hoy, es alucinante que ni la Comunidad ni ninguna de las financieras rescatadas hayan tenido el detalle de colaborar con otra empresa de la que dependen 3.000 puestos de trabajo. Me parece genial que Esperanza Aguirre saliera en la foto inaugurando la logística de Inditex en el parque industrial de Meco, pero pienso que los apoyos gubernamentales –sea cual sea el partido dirigente- deberían estar donde se necesitan cuando se necesitan y no apostando por los caballos ganadores, para salir en la foto o para proteger a los de su partido.

No es de extrañar que ante esta desprotección, las empresas del grupo textil Suiteblanco se acogieran a la solicitud de declaración de preconcurso de acreedores, lo que sucedió en el Juzgado Mercantil número 8 de Madrid, presidido por el magistrado Francisco de Borja Villena el 12de junio. Blanco, que es el séptimo mayor grupo textil español por detrás de Inditex, Mango, Cortefiel, Desigual, Pepe Jeans y Tous declara un inventario de activos de 7,9 millones de euros y una relación de acreedores por un total de pasivo que asciende a 2,07 millones de euros. Comienza el cierre de tiendas, liquidando existencias en determinadas tiendas de A Coruña, Alava, Barcelona, Cáceres, Castellón, Córdoba, Girona, Las Palmas, Madrid, Málaga, Murcia, Oviedo, Pamplona, Toledo, Valencia, Vizcaya y Zaragoza, y de dos tiendas portuguesas en Braga y Portimao.  Esta decisión no es resolutiva y le permite negociar durante tres meses una solución que evite la antigua suspensión de pagos. No es la única, otras empresas de moda se encuentran en la misma situación y han presentado concurso de acreedores, como Caramelo, Victorio&Lucchino, Sita Murt y Hakei. También protagoniza el mayor ERE del sector moda, anunciando una reducción de plantilla que afectará a más de 700 trabajadores.

Muy a finales de 2013 entra en escena el grupo Al Hokair; busca la forma de introducirse en el mercado europeo y ve en la situación de SuiteBlanco, con la que mantenía colaboraciones y acuerdos de franquicias en el mercado árabe y centroasiático, una oportunidad perfecta. A mediados de enero de este año se ultiman los detalles del acuerdo y mientras se espera la decisión de los administradores concursales sobre la oferta del grupo para las sociedades de Blanco, AlHokair se hace con el control de los derechos de propiedad intelectual de Blanco y comienza a renegociar  todos los contratos vigentes de la empresa, desde los alquileres de locales comerciales hasta las deudas con los acreedores, con la asesoría de CBRE, una empresa internacional que ofrece servicios de consultoría, comercialización y servicios inmobiliarios. Al Hokair crea una sociedad para operar en España – Global Leiva, constituida en septiembre- y adquiere derechos sobre otras franquicias de moda, como Aldo (calzado), Accesorize (complementos) o Monsoon (moda femenina), mientras se plantea la asociación con otros grupos pendientes de hacer su entrada en el mercado español, como Gap o Marks & Spencer.

Hoy mismo se ha publicado en varios medios económicos la decisión, por parte de Al Hokair de mantener en la plantilla de su filial española a Bernardo Blanco Moreno, y a cinco de sus ejecutivos de confianza – Gustavo Calvo Cruz (director financiero y de desarrollo de Blanco), José Alberto González López (del departamento financiero de Blanco), Berta Martínez de Frutos (responsable de recursos humanos), Cristina Soria Alonso (directora de relaciones laborales y administración de personal) y Margarita García Heredero (directora de operaciones)-, disipando así, las dudas surgidas sobre cambios en la cúpula de SuiteBlanco.

La negociación para la compra de Blanco, se basó en el mantenimiento de los contratos de 1.200 de sus empleados y en el valor de la transacción, que finalmente fue de 40 millones de euros. Al Hokair también pagó en efectivo 1,5 millones de euros a los acreedores de la empresa, asumió una deuda por valor de 6,44 millones y abonó los gastos y créditos generados por el mantenimiento de la actividad de Blanco desde el 1 de noviembre pasado hasta la consumación de la venta, con un valor de 5 millones de euros.

Al Hokair es uno de los mayores grupos de Oriente Medio, con ramificaciones inmobiliarias, hoteleras, industria del entretenimiento y moda retail, contando con 1.400 tiendas en nueve países y franquicias de marcas como Topshop, Cortefiel, Desigual, Superdry, Uterqüe, Zara, Oysho, Stradivarius, Gap, Pull&Bear o Mango, hasta un total de más de setenta firmas. Cotiza en bolsa y su cierre el año pasado cerró con unos beneficios que ascienden a los 919,55 millones de euros.

 

 

Marga G.-Chas ocaña