Nuevos materiales, el Flexicel

Muchos materiales que surgen de las investigaciones en laboratorios de química terminan como aplicaciones en los lugares más insospechados, es decir en lugares completamente antagónicos, como puede ser en una compresa y el revestimiento de componentes en una nave espacial. De estos nuevos materiales, el Flexicel nos ha llamado la atención, pues los materiales que lo compone están revolucionando poco a poco los objetos de la vida cotidiana. Espumas de Polietileno, cauchos espumados, PUR, Espumas de PVC, aherrójeles, adhesivos, espumas de melamina, derivados textiles, films y masas pesadas, eso es Flexicel y se elabora en Portugal y en España.

El grupo Flexicel tiene sus sedes principales en el Polígono Industrial de Sequeiro, Braga y en el Polígono de Can Comelles, Esparraguera, Barcelona. Funciona desde 1992 y son líderes en el marcado ibérico, con importantes exportaciones al resto de Europa, África y América del Sur. La particularidad de esta empresa, especializada en la transformación de plásticos celulares, es la posibilidad de “trabajar a la carta”, adaptando para el cliente los formatos, diseñándolos o guiándose por un diseño presentado y reproducirlo.

Los sectores a los que se dirige la producción de Flexicel son prácticamente todos: Automoción, Suministros Industriales, Climatización, Construcción, Deportes, Electricidad y Electrónica, Electrodomésticos, Embalajes, Energías Renovables, Frio Industrial, Industria Aeroespacial, Industria de Proceso, Industria Militar, Industria en General, Medios de Transporte, Obra Publica, Ocio, Promoción y Publicidad, Seguridad, Sector Servicios.

Las soluciones son compatibles con las normas para la protección del medio ambiente, tanto a la hora de fabricar como del resultado final. A rasgos generales, Flexicel ofrece gran aislamiento acústico para todo tipo de espacios. Disponen de cabinas tecnológicas para los continuos ensayos y probar los materiales antes de salir de fábrica. Del mismo modo se garantiza una gran resistencia térmica a todos sus revestimientos especializados en las variaciones físicas o químicas que alteran la temperatura.

Si queremos evitar que dos sistemas intercambien elementos (líquido, aire, polvo), manteniéndose completamente aislados, Flexicel garantiza estanqueidad completa en sus juntas, incluidas las de hormigón, material complicado por sus posibles dilataciones. En vistas a proveer un servicio completo a sus clientes, los laboratorios han creado unos fantásticos mecanismos de filtrado (ideales por ejemplo para los acuarios), cuyos resultados satisfacen todas las pruebas sometidas a nivel de partículas.

El problema más cotidiano para trasportar elementos es su embalaje. Tanto a nivel industrial como personalizado, Flexicel dispone de maquinaria de última generación para “rellenar” con sus espumas y garantizar su protección en el transporte o guardado, adaptando sus materiales al elemento transportado. La posibilidad que se abre con estos materiales es infinita. Lo mismo que se pueden adaptar al textil para darles una consistencia estudiada, reforzando ciertas propiedades (como podría ser estanqueidad), podemos revestir unos altavoces con su aislamiento acústico o un puente en la autopista, todo bajo un control riguroso y la tecnología más innovadora, para que todo tenga un trato “especial”.

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Toni Ferrando.