Los Reyes de los Multimillonarios: Kokomo Ailand

admin 6 enero, 2016

Cuando uno es indecentemente millonario y le quedan pocas cosas por desear en el mundo porque ya se tiene de todo, hay pocos caprichos que resulten auténticamente deseables; para estos casos hay que agradecer que la creatividad, la imaginación y los avances tecnológicos difuminan cada vez más la línea entre lo imposible y lo factible. Para ilustrar con un ejemplo no hay más que ver esta especie de isla, yate, chalet de lujo, que con el nombre de Kokomo Ailand que representa a la perfección el colmo de la idea de comodidad y privacidad para un viaje vacacional en familia.

Kokomo Ailand es una isla artificial, pero también es un yate, porque navega y además incluye un chalet de lujazo, ya que cuenta con un dúplex rodeado de exóticos jardines que además del espacio para disfrutar cuenta con helipuerto, zona de marina y aparcamiento para lanchas rápidas y submarinos. Vamos a explicarlo un poco más, porque la verdad es que es alucinante.

Kokomo Ailand es una propuesta súper exclusiva de la empresa de yates de lujo y submarinos Migaloo Private Submarines Yachts. Si no los conoces aún, ya va siendo hora.

Básicamente es una plataforma flotante con motores incorporados que le permiten desplazarse hasta alcanzar una velocidad de 8 nudos. La plataforma cuenta con varias plantas que están comunicadas entre sí por terrazas, escaleras y ascensores en un sistema que recuerda las distintas cubiertas de un crucero; alcanza una altura de hasta 80 metros (auque se puede modificar la versión, medidas y altura al gusto del cliente) y está coronada por una atalaya – mirador con terraza que puede ser cualquier cosa, desde un ático de lujo con suite con bañera de hidromasaje con fondo de cristal, hasta una sala de juegos o un cine.

Kokomo Ailand está ideado como una combinación de hotel de lujo, parque acuático y espacio de recreo por lo que cuenta, no sólo con todas las comodidades y lujos imaginables, sino que además incorpora todo tipo de recursos para el ocio: sauna, gimnasio, jacuzzis, un club de playa, exuberantes jardines tropicales interiores con palmeras, cascadas de agua y toboganes, piscina, un comedor subacuático, parrilla para barbacoas, cine al aire libre y hasta una zona para alimentar todo tipo de animales acuáticos (incluidos tiburones). Para entrar y salir con prisa tiene un helipuerto incorporado y para disfrutar de una experiencia náutica total, la estructura cuenta con varios muelles de atraque para todo tipo de naves, desde lanchas hasta yates o submarinos.

Todo en Kokomo Ailand puede ser modificado a gusto del cliente, por lo que, además tiene multitud de posibilidades que se le pueden modificar o añadir, como un casino o una sala de conciertos. Lo que está claro que Kokomo Ailand lo tiene todo para convertirse en un refugio requete privado para todos aquellos que busquen, como se suele decir, escaparse del mundanal ruido.

Es imposible decir un precio para Kokomo Ailand, ya que hay muchos factores que dependen directamente de lo que encargue el cliente y que pueden hacer variar el precio final, pero digamos para encargar el modelo más pequeño y básico hay que partir de un precio básico de10 millones de dólares.