Claves para unas vacaciones exclusivas

admin 21 julio, 2016

La forma en la que los ricos y famosos quieren pasar sus vacaciones exclusivas está cambiando desde hace unos años. Hace un par de décadas se valoraba una cierta visibilidad que contribuía a la imagen pública del personaje y los destinos estaban prácticamente determinados por los alojamientos de lujo, sobre todo grandes hoteles de cinco estrellas que ofrecían una serie de prestaciones inigualables: profesionales a disposición del huésped para su servicio personal (criadas, masajistas, mayordomos, camareros; cocineros, conserje personal, secretario, ayudantes, peluqueros, personal shoppers), posibilidad de actividades únicas (entradas para espectáculos exclusivos, reserva de actividades en zonas privadas como playas o parques naturales: cenas, picnics, fiestas) o medios de transporte a disposición del huésped que iban desde jets privados, helicópteros o yates hasta Ferraris en la puerta para darse un paseíto). Era la época en la que estaban de moda hoteles como Hotel Du Cap Eden-Roc en Antibes o el George V en París.

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Hoy en día todo esto ha dado un giro de 180 grados. La privacidad se impone como el criterio fundamental a la hora de escoger destinos para unas vacaciones exclusivas y los que verdaderamente son muy ricos, no necesitan que les proporcionen personal especializado o medios de transporte, porque ya tienen los suyos propios, por tanto, la progresión lógica, la continuidad a esta tendencia pasó a la oferta, cada vez más visible, de villas privadas que se alquilan para vacaciones con todos los servicios y necesidades incluidos. Comenzaron a surgir empresas dedicadas única y exclusivamente a la compra, reforma y alquiler de villas de lujo en lugares a cuál más éxotico.

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Hace poco te habábamos de la posibilidad de alquilar villas, para tus vacaciones exclusivas, a través de Bright Blue Villas, una empresa especializada en villas de lujo en las Islas Griegas, o, por poner otro ejemplo podemos mencionar a Villazo, que es una de las que están más de moda en este momento y que ofrece villas-hotel de ultra lujo en destinos como Aspen, Saint Tropez o Miami.

Villazzo fue creada en 2002 por el magnate del software alemán Cristiano Jagodzinski y actualmente posee 27 exclusivas mansiones de lujo en Miami, Aspen, París, Courchevel, Saint-Tropez y Marbella, pero no es sólo por sus villas –que son asombrosas- por lo que se ha posicionado en el top de este tipo de empresas, sino porque ofrece a sus huéspedes todo tipo de servicios imaginables para sus vacaciones exclusivas que justifican la media de 30.000 dólares al día que cuesta alquilar uno de sus alojamientos: la máxima es “todo es posible” desde coches deportivos hasta cualquier tipo de transporte terrestre, aéreo o marino para volar a playas, pistas de esquí o a dónde sea necesario, hasta cerrar locales para uso privado, un restaurante para una cena o un club para una fiesta y siempre con un servicio profesional e impecable capaz de conseguir cualquier cosa dentro de lo habitual de un hotel de lujo o en general del ocio y entretenimiento.

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Pero hasta esta opción se está quedando pequeña, porque ahora la moda es alquilar no sólo un alojamiento, sino complejos enteros que están en zonas inasequibles para los mortales comunes, la busqueda de las vacaciones exclusivas ideales: islas privadas, parques naturales en espacios protegidos de cualquier continente. Ahora lo ultimísimo de lo ultimísimo son los multimillonarios jugando a ser anfitriones y poniendo a disposición de sus huéspedes auténticos paraísos naturales. El primero que abrió esa puerta y que sigue liderando esta tendencia es el dueño de Virgin, Richard Branson, que además de ha sido pionero en concepto de complejos exclusivos para alquilar y en muchas otras cosas.

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Richard Branson, es uno de los hombres más ricos del mundo, con una fortuna valorada en 5 billones de dólares (billones con B) es sibarita, atrevido y bastante caprichoso. Hemos hablado de él en distintas ocasiones y la verdad no nos cansamos de ver las cosas que hace. Para Richard Branson no hay límites, ni siquiera el cielo; entre sus propuestas de Virgin Limited Edition (la sección de Virgin Group que se dedica a las vacaciones más exclusivas) se puede desde acampar –eso sí, siempre de lujo- en el desierto del Sahara, hacer un safari fotográfico en Kenya o ver las auroras boreales más allá del círculo polar ártico y decimos que ni el cielo es el límite porque con Virgin Galactic planea ofrecer vuelos espaciales suborbitales por 200.000 dólares.

Pues bien, Necker Island en las Islas Vírgenes Británicas, propiedad de Richard Branson sigue siendo hoy en día el complejo vacacional más caro y lujoso del mundo, aunque desde hace poco hay otro que le anda muy muy cerca y hemos hablado de él hace poco, nos referimos a Musha Cay, el resort que el mago millonario David Copperfield se ha construido en un archipiélago de 11 islas en las Bahamas, a unos 130 kilómetros de Nassau y que está gestionado por una empresa americana, Sanctuare, que representa el 18 por ciento de los complejos turísticos de este tipo, haciendas, villas, mansiones, ranchos, casas de campo y demás, que se alquilan como alojamientos vacacionales ultra lujosos y súper exclusivos.