El comercio tras el Tratado del Pacífico 2015
El comercio tras el Tratado del Pacífico 2015 afectará a todos los productos a nivel planetario, incluidos los de lujo, en un plazo medio de tiempo, probablemente en este año 2016 entrante. Sólo debemos aplicar una simple regla de tres para caer en la cuenta. Si al 40 % de los productos que circulan por el mundo (los afectados por este acuerdo internacional), se les va a retirar aranceles y gravámenes para facilitar su venta, también aumentará la competitividad y, si nada falla, se bajarán los precios. Si el coste del transporte no varía, en definitiva, salvo subidas exageradas del petróleo, tendremos productos asiáticos de lujo más baratos y eso supondrá una bajada del precio de los productos europeos y de otras áreas excluidas en este Tratado.
El encuentro tuvo lugar el pasado 5 de octubre en Atlanta (EE.UU.). Estados Unidos, Japón, Perú, México, Chile, Singapur, Brunéi, Australia, Canadá, Malasia, Nueva Zelanda y Vietnam mandaron nutridas representaciones con la intención de regresar a sus países con un satisfactorio Tratado que repercutiera en todas las áreas del comercio. Tras maratonianas sesiones (que se han llevado a cabo durante 5 años en secreto), se llegó a un pacto que será fundamental para la nueva configuración de la producción de materias primas y manufacturación en general en estos 12 países, desde el cultivo de hortalizas, hasta los tratamientos más complejos de la farmacología.
Aunque la “regla fundamental del mercado” no se cumpla con respecto a las repercusiones en otras zonas bañadas por otros océanos, lo que está más que claro es que se podrá comprar más barato y en más variedad al menos en estos 12 países firmantes del pacto. ¿Se acordará un encuentro entre los países de la Franja Atlántica en respuesta? ¿Pactos comerciales renovados entre Europa (incluyendo Rusia) y China? Probablemente esperarán todos y observarán el éxito o fracaso derivado del Pacto, algo habitual cuando Estados Unidos forma parte de alguna “asociación” internacional.
Este acuerdo económico (TTP) amenaza principalmente a las aspiraciones chinas de monopolio en Asia. Hasta el presidente Obama calificó de “exitoso” el Acuerdo alcanzado y felicitaba a los 12 ministros reunidos. “Un acuerdo histórico que posibilita un comercio más liberalizado y sostenible”, tal y como aseguraban el Canciller de Chile, Heraldo Muñoz y el ministro de México, Idelfonso Guajardo. Sólo falta esperar a los resultados y ver si realmente los productos aumentan de calidad y si sus precios serán más competitivos que los chinos. Debo recordar que los chinos no son especialmente grandes exportadores del lujo, más bien, importan lujo y cada vez en mayor cantidad, lo que puede permitir que la balanza del mercado mundial se equilibre y el protagonismo deje de llevárselo siempre el gigante asiático.
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Toni Ferrando.