Guarderías de lujo

Tal como andan los precios de las guarderías, incluyendo las municipales, parece mentira que no se cuide un poquito más su diseño y funcionalidad. Ya no sólo por el precio, sino por la importancia que estos y otros aspectos tienen en el desarrollo de los niños tan pequeños, sus aptitudes y sus capacidades. Al hablar de lujo no nos referimos al precio, sino al auténtico lujo que supone para la educación del niño el poder desarrollarse en cualquiera de estos centros, ya que espacio, luz, color y equilibrio son los pilares que necesita un espacio destinado a que los niños aprendan dentro de un entorno lúdico. Por eso hemos indagado sobre cuales están consideradas las mejores guarderías del mundo y esto es lo que hemos encontrado.

Ecole Maternelle Pajol (Paris, Francia)

Situada en la Rue Pajol, del distrito 18 de París, la Ecole Maternelle Pajol ocupa un edificio de 1940 reinventado por el estudio de arquitectura Palatre y Leclère (un estudio fundado en 20116 por Tiphaine Leclère y Olivier Palatre) utilizando el color como lenguaje. El severo y antiguo edificio de ladrillo se viste de colores y pasa a ser una parte indispensable del paisaje, iniciando a los niños a conceptos como el arte y el arte público.

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Fuji Kindergarden (Tokio, Japón)

La guardería Fuji ha sido escogida en varias ocasiones como la mejor del mundo. Se trata de una construcción especialmente diseñada para los niños por el estudio Tezuka Architects que se encuentra a las afueras de Tokio. El edificio, de forma oval, es un zona de juegos infinita, un lugar abierto en el que la naturaleza forma parte de las aulas y el ambiente es el de un patio hasta durante las clases gracias a soluciones súper imaginativas.

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Guardería Ramat Hasharon (Tel Aviv, Israel)

La guardería Ramat Hasharon está ideada por el estudio Lev Gargir Architects para estimular a los niños en todos los sentidos, con formas, movimientos, colores, juegos, sonidos… y siempre respetando la relajación del niño, sin estridencias. Los amplios espacios de la guardería Ramat Hasharon ofrecen a los niños sensación de libertad y transmiten tranquilidad gracias a un equilibrio perfecto entre formas y colores. El interiorismo y mobiliario ha sido obra de Sarit Shani Hay.

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Kindergarten Kekec (Ljubljana, Eslovenia)

La guardería Kekec es un ejemplo de cómo con pocos medios y mucha imaginación se pueden crear espacios que ayuden a los niños a desarrollar sus habilidades. Lo que veis es una ampliación de una guardería ya existente que se realizó en tan sólo 3 días y en la que todo, hasta el mobiliario es transformable en un juego. Construida en madera, tanto exterior como interior, Kekec es como una cabañita cuyas paredes exteriores están concebidas como un juego de listones de colores, pudiendo cambiar el aspecto de la escuela cada día. En el interior es igual, todo el mobiliario permite transformar el espacio cambiando las formaciones, por lo que, en realidad, toda la guardería es un útil espacio polivalente. El diseño es del estudio Arhitektura Jure Kotnik.

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Mama Smile (Tokio, Japón)

Aunque viendo la amplitud y el espacio del interior no lo parezca, Mama Smile es una instalación ubicada dentro de un centro comercial, diseñada por el estudio Emmanuelle Moureaux Architecture + Design. La idea era crear una ciudad en miniatura, llena de color y que transmitiera al niño sensación de seguridad, para ello se basaron en la figura de la silueta de una casa, con forma típicamente infantil que se repite a modo de tabiques dividiendo el espacio en distintas áreas y de hueco a modo de acceso y todo en siete colores diferentes. Todo está cuidadosamente escogido según el concepto «Iro-Iku», un método que aprovecha el efecto del color para desarrollar en el niño la «concentración», «imaginación» y «comunicación».

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Marga G.-Chas Ocaña