Gabrielle, el nuevo perfume de Chanel para regalar

Gabrielle es el nuevo perfume de Chanel, su lanzamiento más importante en las dos últimas décadas. Es una fragancia inspirada en la fuerza y rebeldía de una joven Cocó Chanel y de la que toma su nombre real que aspira a convertirse en un icono de la firma, comparable a su mítica fragancia Chanel Nº5. La presentación de Gabrielle fue este otoño, acompañada de una espectacular campaña publicitaria protagonizada por la actriz Kristen Stewart y su éxito ya lo ha convertido en el perfume más deseado para estas navidades.

La última fragancia original de Chanel fue Chance, que salió a la venta en 2012. Desde entonces, todas las presentaciones perfumísticas de la maison fueron versiones y ediciones limitadas de perfumes ya conocidos; apuestas seguras basadas en los icónicos aromas de creaciones como Nº5, Nº19, Mademoiselle, Cocó o la mencionada Chance y con primeras figuras del cine o la moda como protagonistas de campaña. Por eso, el lanzamiento de Gabrielle, es todo un acontecimiento para la firma, acompañado de presentaciones exclusivas en puntos selectos de venta, de algunos países en los que la marca cuenta con especial presencia.

Gabrielle se ha inspirado en la figura real de una joven Cocó Chanel, en su inconformismo, su energía y rebeldía. Es por ello que el perfume ha tomado como nombre el auténtico de Cocó, una mujer que reivindicó con pasión la independencia y el derecho de las mujeres a decidir quién quieren ser, una auténtica adelantada a su época que revolucionó mucho más que la moda, ya que cambió la forma de estar pública de las mujeres. Como se puede apreciar, es toda una declaración de intenciones sintetizada en un aroma luminoso, solar, ligero y femenino, compuesto por un original bouquet de flores blancas.

Todo lo relativo a Gabrielle está cuidado al detalle. Basado en un claro concepto, el perfume ha sido creado por Olivier Polge, perfumista de la firma de segunda generación, quien sucedió a su padre Jacques Polge en el cargo cuando éste se retiró en 2013. Desde su incorporación a la firma, Oliver Polge ha estado trabajando en la composición de Gabrielle, para la cual, tuvo carta blanca. La única indicación por parte de la firma fue la de hacer “un gran perfume femenino”.

Gabrielle se ha creado conforme a los más altos estándares de calidad y utilizando sistemas tradicionales mejorados por la innovación científica. Polge escogió cuatro flores blancas, muy clásicas dentro de la historia de la perfumería y representativas de las fragancias de Chanel: flor de azahar, jazmín, ylang ylang y un toque de nardo. Las flores para su elaboración son cultivadas por la propia firma en sus campos de Grasse y posteriormente su aroma se intensifica con un tratamiento a nivel molecular, que se realiza en colaboración con el Laboratorio de Creación y Desarrollo.

El resultado es un perfume ligero y femenino que el propio Olivier Polge define así: «Me gusta definirlo como floral, muy femenino y luminoso. El toque solar lo hemos obtenido tratando las flores de forma volátil, menos texturizada y densa respecto a como se ha venido haciendo en la perfumería de los últimos tiempos. Esto nos ha permitido hacer un perfume agradable, que fluye y tiene mucha personalidad».

El frasco de Gabrielle también es un diseño exclusivo de Chanel, creado por Sylvie Legastellois, directora creativa de la firma, que quiso reflejar el espíritu innovador y libre de Gabrielle Chanel como mujer, en perfecta armonía con el carácter del perfume. Hasta el más insignificante detalle tiene su razón de ser: la forma y la transparencia del frasco, el tapón, el envoltorio, la etiqueta, todo está basado en detalles relacionados con la figura de Gabrielle Chanel.

Para la edición limitada de Gabrielle se ha creado un estuche especial, inspirado en una caja que le fue regalada por el duque de Westminster, un estuche elaborado en piel de cordero blanco por fuera y con un elegante interior dorado. Este estuche está elaborado a mano y se han hecho tan sólo 83 ejemplares, uno para cada uno de los frascos numerados (83, como homenaje al año de nacimiento de Gabrielle Chanel, 1883).

Aunque puede parecer algo sencillo, han sido necesarios siete años de investigación y un equipo integrado por 30 profesionales para llegar a crear el frasco perfecto para Gabrielle. Un frasco que ha supuesto un reto para los maestros vidrieros de Baccarat, ya que nunca se había hecho un frasco de perfume con paredes tan finas. Para su aspecto final se han utilizado las mismas técnicas que se utilizan en joyería para tallar diamantes.

Así comenta Sylvie Legastellois su proceso creativo:

«Mi obsesión ha sido aligerarlo hasta el punto de que el vidrio, casi invisible, dé la ilusión de que el perfume está en suspensión»

El lanzamiento de Gabrielle ha estado apoyado por una intensiva campaña publicitaria Ideada por Thomas du Pré de Saint-Maur, Director de Recursos Creativos de Chanel Fragrance & Beauty y Fine Watches & Jewelry, con un spot dirigido por Ringan Ledwige, protagonizado por la actriz Kristen Stewart y con banda sonora de Beyoncé (sido “Runnin’ (Lose It All)” de Naughty Boy , interpretado por Beyoncé y Arrow Benjamin).

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Así explica Thomas du Pré de Saint-Maur sus intenciones a la hora de diseñar la campaña:

«Tomamos deliberadamente la línea opuesta al storytelling. Queríamos transmitir una emoción, contar una sensación más que una historia: en vez de relatar su vida, optamos por centrarnos en la personalidad libre y rebelde de Gabrielle Chanel. En mi opinión, esta cualidad es, hoy en día, lo más difícil de encontrar y a la vez lo imprescindible: ‘sé tú misma y permanece fiel a tus ideas’, ese el mensaje universal que queremos transmitir a las mujeres, y aunque ninguna lo sentirá de la misma manera -es una cuestión de percepción, de experiencias vividas, de personalidad y de emociones- con esta película vamos a llegar a cada mujer a través de todas las mujeres».